Falleció Ceferina Banquez, soberana del bullerengue y la chalupa
Venía de una familia con tradición cultural.
La mañana de este miércoles se conoció el fallecimiento de la cantadora bolivarense, Ceferina Banquez, a sus 80 años, según lo confirmó Javier Mutis, su apoderado artístico.
Banquez murió en su casa en Cartagena, después de enfrentar deterioro en su salud, que la llevó a estar en urgencias en los últimos meses.
Nació en 1943 en Guamanga, vereda de El Carmen de Bolívar, y hacía parte de una familia que tenía la tradición del bullerengue y la chalupa, que incluye a sus tías María del Carmen Teherán y María de los Reyes Teherán.
Ceferina fue reina del Festival de Bullerengue de Maríalabaja, en el año 2009 y una conocedora absoluta de aires como el bullerengue sentao, la chalupa, el fandango de lengua y el son de negro, parte de una tradición de baile cantado que sobrevive gracias a su aporte sonoro, reseña Jaime Andrés Monsalve, en Radio Nacional de Colombia.
Su vida estuvo marcada de tristes acontecimientos, por hechos de violencia sufridos en su Guamanga natal. Amenazas, chantajes y hasta el asesinato de un sobrino, hizo que saliera de la población en calidad de desplazada hacia Maríalabaja.
En ese sitio hizo las canciones icónicas que hablaban de esas situaciones como “Botando sangre por la nariz”, “Pundunga”, “Apegaíta” y “Estebana”.
Ceferina lanzó en el año 2012, “Cantos ancestrales de Guamanga”, bajo la producción del gestor cultural David Lara y dirección musical de José Álvarez, un trabajo que incluye temas autobiográficos a ritmo de chalupa, fandango y bullerengue sentado.
En 2018, durante su gira por el Cono Sur, su concierto en la Casa de la Salud de Concepción, Chile, fue grabado y lanzado en formato de LP dos años después, bajo el nombre de “¡No me dejen sola!”.
A principios de febrero se dio a conocer el próximo lanzamiento de “Que le baile yo”, su tercera producción, bajo el sello Fundación OM Producciones, y la intención era presentarlo en vivo por Estados Unidos y Europa.
Ceferina Banquez deja siete hijos tras su partida.